La preparación frente a episodios de estrés térmico es fundamental para garantizar la salud y el bienestar de los trabajadores, especialmente en sectores como la construcción, la agricultura y otros entornos al aire libre. Con el aumento de las temperaturas a nivel general y, tras el incremento de olas de calor, se vuelve crucial que tanto empresarios como empleados comprendan los riesgos asociados a estas condiciones extremas. El estrés térmico puede provocar desde síntomas leves, como agotamiento y deshidratación, hasta complicaciones graves, como golpes de calor, que pueden amenazar la vida.
El régimen jurídico en el que se basa la prevención de riesgos laborales es el Real Decreto 486/1997, específicamente en lo que respecta a la seguridad y salud en los lugares de trabajo. El ámbito de aplicación, la evaluación de riesgos, las medidas preventivas, la vigilancia de la salud o la información y formación. Este decreto establece un marco legal claro para la protección de los trabajadores.
Para poder prevenir es necesario, además de estar informado, de haber realizado con antelación una evaluación de riesgos relacionados con el lugar de trabajo, considerando factores como la temperatura, la humedad y la actividad física. Las evaluaciones de riesgos laborales deberán tomar en consideración, además de los fenómenos mencionados, las características de la tarea que se desarrolle y las características personales o el estado biológico conocido de la persona trabajadora.
Cuando se desarrollen trabajos al aire libre y en los lugares de trabajo que, por la actividad desarrollada no puedan quedar cerrados, deberán tomarse medidas adecuadas para la protección de las personas trabajadoras frente a cualquier riesgo relacionado con fenómenos meteorológicos adversos, por ejemplo, temperaturas extremas, e incluso se podrá prohibir el desarrollo de determinadas tareas durante las horas del día en las que concurran dichos fenómenos.
En el supuesto en el que se emita por la Agencia Estatal de Meteorología o, en su caso, el órgano autonómico correspondiente de las comunidades autónomas un aviso de fenómenos meteorológicos adversos de nivel naranja o rojo, y las medidas preventivas anteriores no garanticen la protección de las personas trabajadoras, resultará obligatoria la adaptación de las condiciones de trabajo, incluida la reducción o modificación de las horas de desarrollo de la jornada prevista.
Por otra parte, el sector de la Construcción tiene unas disposiciones más específicas recogidas en el VII Convenio General de la Construcción sobre la prevención del estrés térmico, reconociendo los riesgos asociados a las altas temperaturas en dicho sector. Emitido el aviso de fenómeno meteorológico adverso, de nivel naranja o rojo, por la AEMET, la empresa podrá sustituir las tareas inicialmente previstas por la realización de otras tareas que no impliquen riesgos relacionados con estos fenómenos hasta incluso reducir la jornada laboral, o la alteración de la hora de inicio y/o finalización de la misma, según recoge el Art. 74 bis del VII Convenio General de la Construcción.
Desde Prevenvital les recordamos que estar preparado no solo implica la implementación de medidas preventivas, sino también la educación continua sobre los signos de alerta y las mejores prácticas para mitigar el impacto del calor en el trabajo. La capacitación en el reconocimiento y manejo del estrés térmico es esencial. Además, contar con protocolos claros y canales de comunicación efectivos permite una respuesta rápida ante situaciones emergentes, minimizando así los riesgos y promoviendo una cultura de seguridad integral.
La empresa deberá estar informada en todo momento por los cauces oficiales, sobre los registros térmicos durante las horas de trabajo. En la Comunidad Valenciana, se puede hacer un seguimiento de las previsiones a través de la Agencia Estatal de Meteorología y también a través de la App de la Generalitat Valenciana denominada GVA 112 Avisos Emergencias.
Es fundamental asegurarse de que los trabajadores tengan acceso a agua potable y bebidas isotónicas para mantener una adecuada hidratación; establecer períodos de descanso programados en áreas sombreadas o frescas para permitir que los trabajadores se recuperen del calor; proporcionar ropa ligera, transpirable y, si es necesario, ropa especializada que proteja contra el calor; crear áreas sombreadas o utilizar ventiladores para mejorar la circulación del aire en los lugares de trabajo; educar a los trabajadores sobre los riesgos del estrés térmico, sus síntomas y cómo prevenirlo, fomentando una cultura de prevención.
Otra de las medidas preventivas puede ser el monitoreo de condiciones ambientales, es decir, el uso de termómetros y otros dispositivos para medir la temperatura y la humedad en el lugar de trabajo. Así mismo, es muy importante realizar un seguimiento continuo de la salud de los trabajadores expuestos al calor, identificando signos de estrés térmico.
Puedes formarte en esta materia con Prevenvital, a través del siguiente enlace, de una forma fácil, cómoda y accesible: https://prevenvital.es/formacion/estres-termico/?srsltid=AfmBOopVZNoCk-XjOYpUlkD3S7AB_vif9epuxQ2EhNZJYij0rEomY4O-
Como cada año, el Instituto Valenciano de Seguridad y Salud en el Trabajo- INVASSAT- publica un manual de prevención de estrés térmico por altas temperaturas. Para conocerlo en profundidad, Prevenvital les facilita los enlaces.
PLAN NACIONAL DE ACTUACIONES PREVENTIVAS DE LOS EFECTOS DEL EXCESO DE TEMPERATURA SOBRE LA SALUD 2025: https://prevenvital.es/3d-flip-book/plan-nacional-de-actuaciones-preventivas-de-los-efectos-del-exceso-de-temperatura-sobre-la-salud-2025/
PROGRAMA DE PREVENCIÓN Y ATENCIÓN A LOS PROBLEMAS DE SALUD DERIVADOS DE LAS ALTAS TEMPERATURAS EN LA COMUNITAT VALENCIANA – AÑO 2025: https://prevenvital.es/3d-flip-book/programa-de-prevencion-y-atencion-a-los-problemas-de-salud-derivados-de-las-altas-temperaturas-en-la-comunitat-valenciana-ano-2025/